Estoy justo en una de esas semanas en las que me desborda la rutina y los días son tan cortos y la fatiga parece incesante... todo está repleto de infinitos, diminutos e ineludibles asuntos que resolver. Unas de esas semanas en las que siento que, en cualquier momento, me agarra otra gripe que complique un-poco-más-la-historia y encima veo que el calendario me tira por la cabeza fechas terribles, y pienso Ey! Recién estamos en Junio!
Es mentira que el año comienza en enero, o febrero, o marzo. El año, en serio, comienza en Mayo y lo persigue un Junio atormentado. Las iniciativas decididas previamente muestran su verdadera cara y el entorno quiere ver resultados de los asuntos iniciados...
Justo cuando me siento así, pienso en Courbet
Más precisamente, en un cuadro de Courbet: su autoretrato.
Me río un poco jugando frente al espejo en esa pose desesperada y fantaseo otro tanto, con ponerla como fotodeperfil de cotidianas redes sociales... pero realmente, no me siento tan desesperada como el hombre del cuadro.
El desesperado, 1845 |
Él, revolucionario, indómito, polémico, insurgente y sugerente, fue también, protagonista de la Primavera de los Pueblos y de la Comuna de Paris. Courbet es uno de mis pintores favoritos en el mundo mundial.
Gustave Courbet. 1819- 1877 |
Retrató varias veces a su amigo Prudhon, el filósofo y revolucionario francés, contemporáneo de Marx. La influencia política -y socialista- de Prudhon es trascendental en la vida de Courbet, como se observa en gran parte de su obra, atravesada por el interés de mostrar la vida de los trabajadores y el pueblo.
Y como me gusta tanto, hoy les dejo otros cuadros reconocidos de este pintor. Primero "El origen del mundo", otro de mis favoritos, superpolémico (incluso en estos tiempos) por su nivel de realismo, un verdadero quiebre conceptual para la época.
Los dos que siguen, son ejemplos de pintura constumbrista o de género y reflejan, justamente, las costumbres y oficios de trabajadores y trabajadoras contemporáneos a Courbet. Ambos me encantan.
En fin, doy por presentado a Courbet en La Papelera. Y además, estoy satisfecha, he cumplido con una de las tareas semanales pendientes: publicar mi entrada el lunes.
El origen del mundo, 1866 |
Las cribadoras de trigo, 1854 |
Picapedreros, 1849 |
mitocondria.