25 ene 2013

Galletitas de salvado



distinto1, ta.

1. adj. Que no es lo mismo, que tiene realidad o existencia diferente de aquello otro de que se trata.

2. adj. Que no es parecido, que tiene diferentes cualidades.




Anoche hablábamos sobre el reparto de las tareas culinarias (pues en casa, como creo que en todas las casas, hay uno que se ha ido tejiendo en los años). En nuestro caso la 'tradición' hace que raramente yo haga pollo al horno o escabeche, pero que casi siempre prepare el postre, amase, mezcle y hornee recetas basadas en harina. 

En parte es porque me gusta el olor a torta de manzana, a pan, a canela, y porque soy fanatica de la pasta, de los ñoquis, de la torta. Soy una decidida partidaria de la hora del té (no de los desayunos, aunque mitocondria. me rete) y de las picadas con mate que en verano se convierten en cena y terminan con una cerveza bien fría mirando una serie*. Esta receta es ideal para esa "reconfiguración" y además puede hacer de una simple picada algo mucho más memorable. 

El primer lugar donde las comí fue en Inglaterra y descubrí que no tienen nada que ver con las galletitas de salvado argentinas tan asociadas a lo light que la propaganda misma condiciona para no combinarlas con un queso brie.  Las caseras no tienen nada que envidiarle a la versión comercial (algo que a veces es difícil afirmar en el rubro galletitas saladas). 




Son la mejor compañía para el queso (sí, mejor que el pan) y pueden servir para preparar cosas un poco más elaboradas (como salmón ahumado sobre una capa de manteca, quesos crema, pastas de aceitunas and so on, and so on) un día especial. 

Por si hace falta que lo diga, es una receta rápida y en base a cosas que casi siempre están en mi cocina. La planificación aún no es mi campo. 

Lleva
100 grs de harina integral
100 grs de avena 
½ cdita de sal fina
1 cda de azúcar negra
½ cdita de Bicarbonato de sodio
75 grs de manteca bien fría 
Unas gotas de limón
4 cdas de leche entera

Es una masa rápida, que no tiene secretos, y sólo requiere un cortador redondo para darles el buen aspecto que merecen. Se hacen en horno fuerte en unos 8-10 minutos y se pueden guardar varios días en un recipiente cerrado. 

 

¡Espero que les gusten como a mí!


 


* En casa empezamos a ver The Wire, luego les cuento.